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lunes, 6 de enero de 2020

Póngame a Jennifer López envuelta para regalo

Podría disimular y hacer el clásico párrafo previo donde hablo un poco de las películas y series premiadas anoche en la última edición de los Globos de Oro, pero a quién pretendo engañar. Yo le hubiera dado todo a "Parásitos". Todo. Mejor actor, mejor actriz, mejor guión, mejor comedia y mejor drama. Que no haya visto ni "Fleabag" ni "Puñales por la espalda" ni el chorrón de películas que aún no se han estrenado en España también influye. Y que "Joker" y "Dolor de gloria" me hayan dejado tibia influye otro poco.

Al tajo. Los vestidos, la moda, el brilli-brilli, el mamarrachismo:


Los que viváis y/o conozcáis Madrid habréis oído hablar de Unión Bolsera. Es una tienda mítica de Tirso de Molina donde tienen todo tipo de bolsas, paquetitos y envoltorios. Pues bien, de bolsa verde abeto navideño iba Jodie Comer y Jennifer López directamente envuelta para regalo. ¿Sabéis ese momento en los que intentas envolver algo redondo o demasiado blandito y acaba sobrando papel de regalo por todas partes? Pues eso mismo le pasó a Olivia Colman. Olivia, eres majérrima, adorable, gran actriz y seguro que mejor persona, y si se vendiera mi proyecto de programa "De vermuteo con..." tú aparecerías en el piloto. Y en el segundo programa Taika Waititi, el director de la descacharrante "Lo que hacemos en las sombras" y también de "Jojo Rabbit" (pendiente de estreno, pero con una premisa para enmarcar):


Así deberían reaccionar todos cuando dicen sus nombres en las nominaciones.

A ese hipotético programa nunca invitaría a ninguna de estas tres:

¿Susto o muerte?

Margaret Qualley, Lucy Bointon y Rooney Mara tienen algo perturbador. Tan etéreas ellas. Tan blanquísimas. Tan lánguidas. Son como el asmr, que en teoría es para relajarse y en la práctica da yuyu. En cuanto al tocado princesa Leia que actúa en el Bolshoi de Rooney Mara, no sé si me encanta o me horripila. Lo mismo me pasa con el vestido de Gwyneth Paltrow:

Aunque también te digo que la entiendo. Hay veces que te compras un conjunto de ropa interior monísimo y piensas: que lástima que esto no lo vea el mundo entero. Eso mismo pensó Gwyneth.

En cuanto al vestido abanico hecho con papel de Cate Blanchet, con pedrería estilo este sábado actúo en el Molino, me parece simplemente incomprensible. Y Charlize, pues bueno, ella es tan über perfecta que hasta con esa túnica verde corneto parece una diosa.

Y hablando de diosas (cómo hilo, ¿eh?), Gillian Anderson, con vestido corte diosa griega y espalda al aire, solo le faltaba una corona de laurel y/o una cohorte de angelotes para estar totalmente divina. Tengo la teoría de que en las últimas temporadas de Expediente X empezó a chuparle el flow y la atractividad a David Duchovny. Y diréis, qué pruebas tienes. Pues las fotos. Miradle a él antes y ahora, miradla a ella antes y ahora. Ay, Mulder, con lo que tú fuiste.

También me gustó el vestido de ¿seda?, ¿satén?, ¿raso? de Sienna Miller y el homenaje a Lola Flores que se marcó Zoey Kravitz, con más lunares que en la feria de abril.

En cuanto a los hombres de la gala, pues iban todos muy de negro, muy correctos y muy aburridos. Por favor, señores, que no les engañen. Menos no es más. Menos es menos y más es más, si ya lo dice la propia palabra. Viva el exceso, el horterismo y el "los focos a mi persona". Menos mal que estaba ahí Billy Porter camino del altar con un traje blanco con cola y un par más que se animaron a poner un poco de color a tanto blanco y negro; Wesley Snipes recordó la escena del baile de Grease (quizá el traje se lo prestó su padre, tenía chorreras y todo) y el niño Roman Griffin Davis lució chaqueta naranja y más monez que Baby Yoda.

En toda entrega de premios hay una sección que, esta vez, denominaré "como unicornios vomitando arco iris".

El premio a la más cursi se lo lleva Dakota Fanning por unir el tul, el malva, el escote corazón y las mangas abullonadas en un mismo vestido. Kirsten Dunst iba medio sobria en comparación. Kaitlyn Dever, la chiquilla de "Creedme", iba a tope de volumen y floripondios, pero llevaba el vestido más bonito de la sección "unicornios y arco iris".

Sé que os lo estaréis preguntando y, no os lo vais a creer, pero Heidi Klum no acudió a los Globos de Oro ni a ninguna de las cienes y cienes de fiestas posteriores. Es humana, a lo mejor está en cama con mocos.

Y vosotros, ¿le hubierais dado hasta el premio de mejor película de animación a "Parásitos"?, ¿a qué celebrity llevaríais a "De vermuteo con"?, ¿por qué no estaba nominada "Mindhunters"?, ¿es Gillian Anderson un vampiro?

lunes, 7 de enero de 2019

El vestido lila, ¿azul?, ¿lavanda? de Lady Gaga

Se dice que desde la Luna se ve la Gran Muralla China. Y anoche también se veía el vestido ¿malva? (¿lila?, ¿azul?) de Lady Gaga. Un vestido más pomposo que los de "Mi gran boda gitana". Tan grande que no hay foto donde salga entero.

el vestido lavanda o lila o malva o azul de Lady Gaga en los Globos de Oro 2019
El vestido seguía y seguía y seguía...

En su mente, Gaga lo tenía todo planeado: su vestido era un guiño al que lució Judy Garland cuando ganó el Globo de Oro por "Ha nacido una estrella", además tenía un número indeterminado de metros extra de cola, y eso es aportación de ella, que se ha imaginado subiendo a por su premio por la nueva versión de "Ha nacido una estrella" sin dejar sitio a nadie más del equipo. Pero el galardón a mejor actriz de comedia/musical se lo ha llevado Olivia Colman por "La favorita".

Lo malo de los Globos de Oro es que premian a películas que todavía no se han estrenado aquí: "La favorita", "Vice", "Green book", "El blues de Beale Street"... Así que no me queda más remedio que hablar de los vestidos cosa que, como bien sabéis, es un asunto no me interesa en absoluto.

Dicen que el negro es elegante. Bueno, no siempre:

El negro adelgaza, pero no tanto. 

Glenn, Jodie, el negro adelgaza, vale, pero si le añades lazos y terciopelos y plumas y vuelo pues como que se pierde el efecto. El chavalito de en medio es Timothée Chamalet. A la edad en que sus amigos del barrio están de botellón, él está paseándose por la alfombras rojas del mundo con una especie de arnés porque está visto que arnés is the new corbata.

Si tienes un tipazo porque el mundo (y la genética) te hizo así, entonces no vas de negro, vas de blanco. Y Jamie Lee Curtis ha sido pibón desde que nació (hija de Tony Curtis y Janet Leigh, llega a salir fea y la abandonan en la puerta de un hospicio) y sigue siendo pibón a sus X años:



Alison Brie ("Glow") y Thandie Newton ("Westworld") lucían tipazo del machacado en el gimnasio y hay que enseñar con aberturas estratégicas aquí y allá. Por cierto, modo cotilleo on, ¿sabíais que Alison Brie es novia de Dave Franco?, ¿sabíais que Dave Franco es el hermano de James Franco?, ¿os parece que hacen una pareja ideal?, ¿la más ideal de los Globos de Oro?

Pues disiento.

Para mí las parejas ideales del evento fueron ellos:

Emily Blunt y John Kraskinski. Sandra Oh y Andy Samberg.

Emily y John son actores, marido y mujer, bellos y simpáticos y residentes en Malibú. Sandra y Andy son actores y humoristas, amigos, atractivos pero no guapos y presentadores de la gala de anoche de los Globos de Oro. Y a mí me encantaría irme de cañas con los cuatro. Quien vio la gala dice que Andy y Sandra estuvieron comedidos, es decir, sosos. Me da igual. Cuando quedemos hablaremos de lo que ellos quieran: de que "Killing Eve" se merecía más premios, de que "Brooklyn 99" es muy graciosa... Con Emily y John me sentiré más cohibida porque son demasiado guapos y porque le he visto el torso a John en "Jack Ryan" y me tiraré toda la noche pensando en tocarle las abdominales.

Sandra Oh se llevó, justamente, el galardón a mejor actriz de serie dramática por "Killing Eve". Pero entre las injusticias está que "Pose" no se llevara nada a casa. Billy Porter debería haber ganado a mejor actor, si ya era surrealista que Richard Madden estuviera nominado, aún más lo es que ganara por "The bodyguard", por favor, si se pasa toda la serie con esta cara acero azul. Si dieran un galardón al elenco que más se luce en la alfombra roja, sería para los de "Pose". Indya Moore iba así de divina, lista para irse a bailar a Studio 54 en cuanto acabara la gala:


El vestido de Rosamund Pike o se ama o se odia. A mí me gustó, me mola además la actitud de Rosamund (¿Rosamunda?) mirando a cámara como si le diera todo igual. Aunque para actitud, rollo, flow y "a mí me la pela todo porque tengo más carisma que todos y lo sabéis" el de Janelle Monáe que fue a la gala vestida de heroína en película de ciencia ficción soviética de los años 60.

A muchos os horrorizará el look galáctico excéntrico de Janelle, pero eso es porque todavía no habéis visto a los auténticos blufs de la noche.

La muchacha envuelta en terciopelo es Caitriona Balfe ("Outlander"), la envuelta en print animal es Anne Hathaway y la de en medio es la que no se pierde un sarao: Heidi Klum. Que no iba yo a acabar una crónica de alfombra roja sin ella. Heidi ha dejado que sus hijos decoren su falda pegándole florecitas con una pistola de pegamento, seguro que es una manualidad muy creativa y que estrecha los lazos entre padres e hijos.  Además, Heidi acudió con su nuevo novio: Tom Kaulitz. Que el nombre no os dirá nada pero, ¿y si os digo Tokyo Hotel? Sí, hombre, el grupo emo que lo petó hace unos diez años.  Pues los líderes del grupo eran los hermanos Kaulitz, fáciles de distinguir porque uno era el que cantaba y llevaba el pelo pincho y el otro era... pues el otro. Y Heidi sale con el otro.

Y vosotros, ¿con qué pareja de famosos actores os iríais de cañas?, ¿de qué color es el vestido de Lady Gaga?, ¿también pensáis que "Pose", "Barry" y "A very English scandal" merecían más premios? Y sobre todo, ante todo, fundamentalmente: ¿por qué no estaba nominada "The terror"?, ¿alguien sabe si es por algún tema organizativo, de fechas de estreno, o es simplemente por una cuestión de mal gusto?

lunes, 8 de enero de 2018

La alfombra (negra) de los Globos de Oro


Va a ser verdad que el negro garantiza la elegancia. Anoche se entregaron los Globos de Oro y todos (menos alguna que otra despistada) acudieron de negro como forma de sumarse al movimiento Time's up de protesta contra los abusos sexuales. Podríamos entrar en una discusión sobre si los eventos cinematográficos son sitio para reivindicaciones, sobre si muchos de los que ahora se suman a la iniciativa han sido cómplices (cómplices, ojo, que no víctimas) de abusos de poder y en su momento se callaron porque les convenía y ahora se visten de negro porque también les conviene, sobre si esto es una lucha real y seria o puro postureo. Os dejo el debate para los comentarios o, incluso, para un artículo dedicado exclusivamente a analizar el tema en condiciones. Porque éste es el clásico post frívolo sobre trapos. Y está difícil el despelleje con tanto color negro… difícil, pero no imposible.


¿Capa de tul y plumas? ¿La Doris Day de las películas con Rock Hudson se ha merendado a Angelina Jolie? Alicia Vikander también se equivocó de película, ella iba de institutriz victoriana que llega a una mansión lúgubre donde pronto empezará a oír voces y ver fantasmas. Lo mismo ésa es la sinopsis de su próxima película y ha robado el vestido para venirse a los Globos de Oro.

El negro es elegantísimo y además adelgaza, vale, sí, pero también es un poco soso. Y como además hayas nacido con horchata en las venas, el resultado es éste:

ZzzzZzzzzZzzzzzzZzzzz

Imaginad una película protagonizada por Kit Harington y su eterna cara de estar a punto de quedarse traspuesto y Dakota Johnson y su eterna cara de estar haciendo memoria porque algo se le olvida camino del súper. Qué pereza estos dos. Podríamos añadir a Michelle Williams, otra persona que necesita una donación de sangre rápidamente. Aunque decir que tienen "horchata en las venas" no me parece lo más adecuado. La horchata es dulce, tiene sabor, sería mejor decir que tienen agua en las venas, o leche desnatada, o esa bebida que a nadie en su sano juicio le puede gustar: la tónica. Kit, Dakota, tenéis tónica en las venas. Sonreíd un poco, que parezca que tenéis ganas de vivir. Aunque si hay alguien que no disimula que a ella los festivales, las presentaciones, los eventos, las fiestas y todo lo que huela a diversión le repugna es Isabelle Huppert. Vanity Fair hizo un riguroso estudio al respecto y contabilizó veinte veces (¡¡¡20!!!) en las que Isabelle no quería estar: ni Cannes, ni Los Ángeles, ella prefiere su casa en pantuflas.

A Isabelle no la anima ni estar cerca de estos dos ejemplares:


Probablemente estéis tan deslumbradas por las hechuras de Chris Hemsworth que no os habéis dado cuenta de que lleva un traje de brilli-brilli con un dibujo de flores. Muchachos, si vuestro traje podría ponérselo Messi en el Balón de Oro, mal.

En cuanto a Ewan, tengo sentimientos encontrados. El 2017 no es el año de la turra del Procés, ni el año del cambio climático, ni el año de "Velaske, soi guapa?". Es el año en que Ewan nos rompió el corazón a todas. Un poco más a su mujer desde hace 22 años, de acuerdo, pero también a todas las fans que pensábamos que él era tope especial. Tú no, Ewan. Tú no eres como los demás, tú eras la fantasía definitiva, guapo, simpático, pero casado y con un porrón de hijos, porque fijarse en típico galán de Hollywood picaflor no tiene ningún interés. Ewan ha hecho algo tan humano, tan vulgar y tan impropio de él como es dejar a la madre de sus cuatro hijos (¡cuatro!) por una actriz más joven. En esta edición de los Globos de Oro consiguió el premio a mejor actor de miniserie por la tercera temporada de "Fargo" y él se las apañó para agradecérselo tanto a su familia (y nombró a su ex mujer y sus hijos) como a sus compañeros de reparto (y nombró a su actual novia y otros compañeros de "Fargo"). ¿Esto es adorable o para darle con un calcetín sudado en toda su hermosa faz? No lo sé, de nuevo, debatámoslo en los comentarios.

¿Y quiénes iban divinamente?  Voto por ellas:

No me convence demasiado el ribete de brillitos del vestido de Diane Kruger, pero todo lo demás me parece bello como Ewan McGregor sosteniendo un cachorrito. Emma Watson lucía un vestido muy original, con transparencias y fruncidos. Por gustarme, me gustan hasta los zapatos. Y Zoey Kravitz iba minimal a más no poder porque cuando llevas unos piedrolos como esos, pues chica, para qué llevar nada más.

A Halle Berry esto de ir de negro le pilló desprevenida y tiró de fondo de armario, en concreto se puso un salto de cama de Woman Secret:

En cuanto a Shailene Woodley, no tengo palabras. Bueno, sí. ¿De qué extraño material está hecho esa especie de jersey de cuello vuelto que me lleva?, ¿es poliester? Y ese pelo bicolor, ¿es que el look Mónica Naranjo en los 90 vuelve a estar de moda?

No podía faltar ella, tú, la misma de ayer, la incondicionaaaaal (dígase cantando como en la canción de Luis Miguel). Sí, Heidi Klum, que ya sabéis que ella no se pierde un sarao. Le encantan. Es el reverso luminoso de Isabelle Huppert. Se plantó para la ocasión un vestido asimétrico con plumitas, una especie de gallina Co-co-uá sexy. 

Y vosotros, ¿qué creéis que hace reír a Isabelle Huppert?, ¿nada en absoluto?, ¿los vídeos de gatitos?, ¿el dolor ajeno? ¿También créeis que el siguiente paso en la crisis de los 50 de Ewan McGregor será ponerse un pendiente y comprarse un Ferrari rojo?, ¿el que peinó a Millie Bobby Brown es un licenciado en arquitectura reconvertido en peluquero?

lunes, 9 de enero de 2017

¿Winona nominada?

Dicen que la entrega de los Globos de Oro es más espontánea y relajada que los Oscar porque no es una gala sino una cena, ¿y qué hay en las cenas?: bebercio. Aunque este año el alcohol comenzó a servirse mucho antes de la entrega de premios. Ya el día de las nominaciones los señores de la Asociación de la Prensa Extranjera (que son quienes votan estos premios) le estaban dando al frasco y allá por la tercera copa, cuando te crees que vas bien, pero para nada, dijeron: "venga, no hay huevos de nominar a Winona Ryder". Y al día siguiente, con toda la resaca, vieron que sí que lo habían hecho: mejor actriz por la serie "stranger things".

Afortunadamente, no se ha llevado el globo de oro. Ha sido Claire Foy por "The crown", una serie también de Netflix y de la que todos hablan muy bien pero... no la he visto. De hecho "ésa tampoco la he visto" es la frase que más se repite cuando una repasa la lista de premiados de anoche. La gran mayoría de las películas ni siquiera se han estrenado aún ("La la land", "Moonlight", "Manchester by the sea", "Fences"...). Así que tendremos que mirar la lista de premiados de televisión: "the crown" (no), "the night manager" (tampoco), "Atlanta" (nop), "Westworld"... ¡sí! Y me encanta, pero no se ha llevado ni los buenos días. Bueno, yo lo he intentado. Hablemos de ropa.

Medalla de bronce, de oro y de plata.


El brilli-brilli triunfó cosa mala. Ahí estaba Kerry Washington vestida de Ferrero Rocher, Millie Bobby Brown ("Stranger things") demostrando que posa mejor a sus (¿doce?, ¿trece años?) de lo que lo haré yo en la vida y la guapérrima Priyanka Chopra ("Quantico") luciendo brillos y escotazo. No puede haber entrega de premios sin escotes hasta el ombligo y este año había para aburrir. Aquí uno. Aquí, otro. Anda, ¡otro más!

Tambien hubo mucho amarillo, ¿por qué?, ¿¡¿por qué?!?!:

Amarillo batido de vainilla, amarillo polo de limón y amarillo bote de mostaza.

Amigas, si el amarillo mostaza queda mal incluso a Natalie Portman, ¿no deberíamos hacer algo al respecto? No sé... ¿prohibirlo? Reese Whiterspoon (escribir bien su apellido a la primera convalida el First Certificate) y Viola Davis iban guapas, pero con cualquier color que pudiera llevar la reina de Inglaterra es cantoso. Esto es así.

Seré mala persona, pero ver a Natalie Portman un poco menos bellísima de lo habitual, mola. Es como quien se compra el especial Argh del Cuore para ver que las famosas también tienen celulitis. No es el sentimiento más noble sobre la faz de la tierra, pero oye, da trabajo a la redacción del Cuore. Por eso sentí cierta alegría perversa al ver a Jessica Chastain con esta cosa horrenda:


Hasta Amy Adams iba un poco mñé, envuelta en un vinilo de esos que decoran los salones.

Aunque para mñé, este rollo princesa Disney con sobredosis de azúcar y frosting de fresa de Felicity Jones y Lilly Collins:

He visto pastelerías con cupcakes más sobrios.

Nicole Kidman, dentro del mundo princesas Disney, optó por ser un personaje de "Frozen". No sólo iba vestida de reina de las nieves, sino que su cara estaba más helada que nunca. ¿Será que es amiga de Sofía Mazagatos y ella le ha contado su secreto de belleza: meter la cabeza en el congelador unos minutos? Podría ser.  Si Rebeca "duro de pelar" es prima de Benicio del Toro, ¿por qué no iban a ser amigas Nicole Kidman y Sofía Mazagatos?:


Drew Barrymore iba de ángel de abeto de Navidad. Me la puedo imaginar coronando el abeto gigante del Rockefeller Centre. Michelle Williams, de profesión lánguida, iba muy ídem. La imagino como una de esas actrices que abrirá una tienda de productos ecológicos si dejan de contratarla al cumplir los 40 años, de las que dicen que le están pasando "cosas bonitas con gente bonita", que te abraza con sentimiento cada vez que te ve, aunque luego no recuerde tu nombre.

En cuanto a los hombres, hubo mucho soserío. Trajes oscuros, pajaritas, bla, bla, bla... Y más vale no salirse de eso o te tomarán por un camarero, como a Jeremy Renner. Daniel Glover innovó y se plantó un traje de terciopelo que parecía el tapizado del sofá de su abuela. Aunque para innovador, Pharrell Williams a lo príncipe hindú.

¿Y quiénes fueron las más elegantes? Me gustó mucho el vestido de Anna Kendrick pero, quizá por el tirante asimétrico, parecía que tenía una teta más arriba que la otra. Sophie Turner (Juego de tronos) iba original pero... no sé, aún no he decidido si su vestido me gusta o me espanta. Pour moi, ellas tres iban sembradas:


Emma Stone ha tenido días mejores, el rollo estrellitas por el vestido que parece que las has ido pegando en clase de plástica... no me convence del todo. Me gusta más el vestido con flecos de Gina Rodríguez, no le hace justicia la foto, en vídeo se apreciaba mejor lo bonito que era. Last, but not least, Evan Rachel Wood con un traje de chaqueta reprecioso.

Y a vosotros, ¿os encanta u os espanta el vestido de Sophie Turner?, ¿me podéis asegurar que "the crown" no es el muermo que parece?, ¿Winona en "stranger things" no os parece Joaquín Reyes haciendo de Winona Ryder?, ¿habéis visto ya "Westworld"?, ¿no?, ¿a qué estáis esperando?

lunes, 11 de enero de 2016

Los parecidos razonables de los Globos de Oro

--> ¿Premio para Sylvester Stallone?, ¿por interpretar a Rocky Balboa?, ¿otra vez?, ¿es Kate Winslet la nueva Meryl Streep?,  ¿o lo es Jennifer Lawrence, que pronto tendrá más premios que años?, ¿alguien ha visto "the revenant"?, ¿sí?, ¿merece la pena?, ¿os la habéis descargado, piratas de la vida? Porque en España no la han estrenado...

Pero a quién pretendo engañar, que aquí no hemos venido a hablar de cine. Ni siquiera de series de televisión. Sólo os puedo decir que asumo que "Jessica Jones" no aparece en las nominaciones de los Globos de Oro por una cuestión de tiempo, del mes en el que fue estrenada. Y que "Mr Robot" tiene un capítulo piloto magistral, y después aquello se desinfla como aquellos souflés tan de moda en los restaurantes de los 80 (espárragos dos salsas, pastel de pescado con forma de ídem y, de postre, un soufflé). Aquí hemos venido a hablar de moda. Y de parecidos razonables:

La actriz de "Mr. Robot", Portia Doubleday y una bola de discoteca. Portia es la de la derecha.

Portia es joven. Portia nunca había ido a unos premios de la envergadura de los Globos de Oro antes. Quizá el vestido, en la mano, no parece la bola de discoteca del Studio 54. Pero, ¿cuál es la excusa de un icono de la moda como Jane Fonda?

Jane Fonda y una coliflor. Jane es la de la izquierda.

Quizá Jane, activista y mujer defensora de la vida sana, (recordad sus videos de aerobic, cuando el aerobic era lo más, y no el zumba, ni el spinning, ni el pilates, vamos, cuando estaban de moda los cócteles de gambas y los soufflés) ha querido hacer un homenaje a su verdura preferida: la coliflor.

Pero no fue la única que en unos premios internacionales del espectáculo decidió homenajear, no a su familia, a su pareja, a su mentor... sino a su comida favorita:

Jennifer López, América Ferrara y un bote de mostaza. El bote de mostaza es el de la izquierda.

Katy Perry, por su parte, homenajeó a un ídolo de su infancia. ¿Madonna?, ¿Cindy Lauper?, ¿Whitney Houston?

No, Elvira.

¿Y quién es Elvira? En realidad, es una tal Cassandra Peterson, una actriz todavía más encasillada que Sylvester Stallone. Su personaje, la gótica sexy con tremendo tupé, Elvira, presentaba programas de terror en la televisión estadounidense de los años 80, hasta convertirse en todo un icono. Por varias razones. Ahora mismo se me ocurren dos.

Elvira es un fenómeno muy de los Estates, pero las estrellas de los Globos de Oro también se acordaron de la vieja Europa. La ¿siempre? elegante Cate Blanchett y esa mujer que no se pierde un sarao, Heidi Klum, demostraron ser auténticas eurofans:

Desde que llegaste ya no vivo llorando, ¡ey!, vivo cantando, ¡ey!, vivo soñando, ¡ey!

Había oído que "eres tú" de Mocedades había sido un gran éxito allende los mares. Ignoraba hasta dónde habían llegado Salomé, su "vivo cantando" y su vestido de flecos.

Pero seamos justos. No todo fueron despropósitos. Alicia Vikander y Saorsie Ronan iban angelicales y monísimas. Helen Mirren demostró, otra vez, que o tiene un pacto con el diablo o desayuna sangre de recién nacido. Kirsten Dunst lució un vestido negro, pero no soso. Eso sí, a costa de pasar toda la gala con una teta a punto de salir a saludar. Y Julianne Moore como siempre. Vamos, divina.

Y luego estaban estas dos extras de Cuarto Milenio:

¿Las chicas de la curva? No, son Rooney Mara y Eva Green.

Rooney, Eva yo, como vosotras, soy blanca tono leche semidesnatada y una cosa os digo desde el cariño, los tonos empolvados no son para nosotras. A nosotras nos quedan bien los colores vivos, todo lo demás nos hace parecer Casper, el fantasma. Pero Rooney, Eva, no despidáis a vuestras estilistas. Creo que vuestros vestidos eran una auténtica obra de arte.

Pero vosotras, Calista, Rachel, echad a vuestras estilistas. Ahora. Ya.

 ¿Mechas rubias?, ¿en el 2016, Rachel MacAdams?

No me resisto a acabar esta crónica de la alfombra roja de los Globos de Oro sin un último parecido razonable. En los tiempos de la Super Pop Rob Lowe era un galán que lo petaba casi tanto como un jovencísimo Tom Cruise. Pues bien, pasan los años, (no tanto ni para Tom Cruise ni para Keanu Reeves) y Rob Lowe ha dejado de ser un galán. Ahora se parece a Michael Douglas en "behind the candelabra", la miniserie de la HBO que retrata la vida de un pianista iconoclasta, hortera y muy amigo de los bisoñes, Liberace:

Michael Douglas interpretando a Liberace a la izquierda. A la derecha Rob Lowe.

Y vosotros, lectores de mis entretelas, ¿vosotros tampoco entendéis que "Empire" se considere un drama cuando es, claramente, una comedia?, ¿creéis que el color mostaza es de los más feos del planeta, con permiso del marrón caca?, ¿de qué verdura os vestiríais si fuerais a una entrega de premios?

lunes, 12 de enero de 2015

La alfombra roja (más roja que nunca) de los Globos de Oro

Indignada me hallo.

Y no porque la siempre elegante Julianne Moore, poseedora del tono rojizo más pedido en todas las peluquerías del globo, se haya disfrazado de bocadillo de papel Albal en la alfombra roja de los Globos de Oro.

No.


Dicen que Dakota Johnson va de Chanel, pero yo juraría que ese vestido estaba en las rebajas del Bershka.

Porque Julianne podría marcarse un Helena Bonham Carter e ir hecha una mamarracha, que a todas nos parecería estupendo y saldría igualmente en la lista de las más divinas.

Lo que me tiene indignada son los premios en sí. No he visto muchas de las películas nominadas y "Boyhood", ganadora a mejor película dramática, me gustó (y más que me hubiera gustado si durara 45 minutos menos), así que no puedo juzgar los premios cinematográficos. Pero los televisivos... Esos sí. Este año se daba la rara coincidencia de que dos series fabulosísimas: Olive Kitteridge y Fargo competían en la misma categoría, en miniseries. Sin embargo, ambas son series dramáticas mucho mejores que la ganadora: The affair. En cuanto a la mejor comedia... ¿Transparent?, ¿en serio? ¡Pero si no es graciosa!

Continuemos con la polémica, pero en los modelazos, ¿qué opináis de cómo van estas muchachas?


Claire Danes parece haber aprovechado un vestido hippie de mercadillo, haberle puesto unas transparencias y ¡ala! lista para la alfombra roja. Rosamunde Pike se planta un vestido lleno de aberturas que no le acaba de quedar muy allá pero, amigas... ¡que parió hace cinco semanas! Y Conchita Wurst deja a medio Hollywood con la boca abierta mientras la señalan y dicen: ¿¡pero si lleva barba?!

A mí me encantan estos tres vestidos. El de Danes tiene pinta hasta de ser cómodo. Al de Pike le fallan unos tirantes demasiado largos, que hacían un efecto algo raro, pero por lo demás, estaba guapísima. Y Conchita llevaba un modelazo muy original, ¿Gaultier, quizá? Seguro que el experto en moda (y habitual de éste vuestro blog) Calamarín, lo sabe.

Y es que al final tanto vestido de alta costura, tanta mujer bellísima (que lo estaría hasta repantigada en su casa con un forro polar del Decathlón, a lo Teresa Romero)... cansa. Todas estas señoras son bellísimas, sí:

Pero qué sosas... Jennifer Aniston incluso lleva un vestido muy estilo La Redoute, que no sorprendería verlo una amiga tuya en un cotillón de Nochevieja. Y Amy Adams, con ese vestido color ¿lavanda?, ¿azul aguachirri?, ¿he metido algo azul en la colada blanca y fíjete lo que me ha pasado?

Menos mal que siempre hay actrices (y arrimadas) que se morirían antes de que las llamaran sosas. Jennifer López se lo puso todo: aberturas, escotes, brillos...

Y Heidi Klum, la mujer a la que siempre invitan a todo, se pasó con el autobronceador. Como no se ande con ojo acabará como la señora de Algo pasa con Mary. También enseñando hasta el dni vimos  por ahí a la guapérrima Kate Hudson, con un vestido que el 95% de la población femenina jamás conseguiría ponerse. 

Heidi no fue la única de rojo. Por una vez, ése fue el color de la noche, y no el negro. A estas alturas de la mañana seguro que montones de crónicas de la alfombra roja de los Globos de Oro se titulan "Red is the new black". De hecho, la protagonista de "Orange is the new black", Taylor Schilling, también fue de rojo, y monísima, oigan:


¿Qué hace Helen Mirren para estar así de estupenda, a su venerable edad?, ¿se baña en leche de burra?, ¿come placentas?, ¿bebe sangre de doncellas vírgenes?... Que le dé su secreto a Catherine Zeta Jones, antes de que siga dándole al bótox como si no hubiera un mañana.

De rojo también fueron dos actrices habituales de la tele: Christine Baranski (The Good Wife, la madre de Leonard en Big Bang Theory) y Alison Janney (Mom, una comedia que sí es graciosa, no como Transparent), y también Lena Dunham que previendo que la iban a poner (un año más) a caldo, decidió, no cambiar de estilista, sino darse de baja de twitter. Sabia decisión:

Su compañera de reparto, Zosia Mamet, que en general suele ir elegante y hasta un punto original, esta vez le pidió prestado el vestido a la Infanta Elena e iba disfrazada de capote de torero.

Las actrices de la serie Girls, en pleno, fueron a los Globos de Oro. Alison Williams de rojo (para variar) y la guapísima Jemima Kirke optó, como Zosia Mamet, por disfrazarse. Si Zosia iba de capote, Jemima iba de Loreen en Eurovisión o de Madonna en la época de Frozen, no está claro del todo.


Lana del Rey estaba nominada por su canción para Big eyes y se plantó un vestido muy Terelu Campos style. Jessica Chastain llevaba un vestido de corte similar, con una pequeña salvedad, que a ella le quedaba de muerte. 

¿Y quiénes fueron las más elegantes? Emma Stone a punto han estado de entrar en esta selección, pero al final opto por ellas tres: Emily Blunt, Anna Kendrick y Naomi Watts. 


Emily Blunt era una diosa griega, por el vestido, por el peinado y por unos pendientes que deben valer más que el PIB de algún país de Centroamérica. Anna Kendrick iba de princesita con un vestido  vaporoso y delicado como un souflé de aire. Naomi Watts se planta un vestido amarillo mostaza, un color que no sienta bien ni a Jessica Chastain, y va elegantísima.

Y vosotros, lectores de éste vuestro blog, ¿quién creéis que iba más elegante?, ¿no echasteis de menos que Emma Stone se tropezara con la lazada de su pantalón y se marcara un Jennifer Lawrence?, ¿pensáis, como moi, que La Lego película debería haber ganado a mejor film de animación?, ¿no os da un poco de yuyu que Benedict Cumberbatch y su señora se parezcan tanto?, ¿necesita Amal Alamuddin un bocadillo de panceta urgentemente?

Contadme...

lunes, 13 de enero de 2014

Crónica de los globos de oro... y Heidi Klum, of course

Hay dos cosas que necesita la televisión actual, y las necesita AHORA. Una es un canal íntegramente dedicado a retransmitir juicios, la otra es que Divinity o Nova o cualquier canal de ésos ofrezca las alfombras rojas de los eventos. De cualquier evento. Si será por eventos. A los americanos les encanta entregar premios, ahí están los MTV o los People Choice Awards con sus premios al mejor beso o a la mejor pareja de ficción para demostrarlo. Anoche se entregaron los Globos de oro y no, me niego a decir eso de que son "la antesala de los Óscar", lo mismo que nunca diré que los Goya son "la fiesta del cine español" ni que Michael Schumacher está en el hospital disputando "la carrera más difícil de su vida".

Lo malo de que sean la antesala (mierda, lo he dicho) de los Óscar, es que la muchos de los premiados ni tan siquiera han llegado a las pantallas de aquí. Así sucede con la ganadora de la noche "la gran estafa americana": mejor película de comedia, mejor acriz principal para Amy Adams, de reparto para Jennifer Lawrence...

Jennifer esta vez no se esnofró al ir a recoger el premio. Una pena. 

Hay que ver esta chica, últimamente se lo lleva todo, si yo fuera ella jugaba al bingo y al euromillones, que algo me cae fijo. Eso sí, su vestido blanco con cuerdecitas aquí y allá no me gustó.

Tampoco ha llegado aquí "Behind the candelabra", la miniserie elegida como mejor ídem y que ha premiado también a sus protagonistas, Michael Douglas y Matt Damon. Matt, ese chico tan mono, tan sanote, que sufre el mismo síndrome que Russell Crowe y Leonardo Di Caprio, es decir, el síndrome de gustarles demasiado la comida basura.

Tampoco ha llegado "Dancing on the edge", la película para televisión que le ha dado a Jacqueline Bisset su premio a mejor actriz de reparto. Bisset es, era, será, de las mujeres más guapas que ha habido en el mundo. Haced clic aquí y veréis. Pero anoche le pasó algo que nos ha pasado a todas alguna vez: no era su día. Su vestido era digno del armario de Helena Bonham Carter:

¡Mis ojos! ¡¡¡¡Mis ojoooooooos!!!!

La señora con el pelo lacado que está a la derecha de Jacqueline es Emma Thompson. Alguien debería decirle que Meryl Streep ya se le adelantó y le quitó el papel de Margaret Thatcher y que la laca es malísima para la capa de ozono.

Mención aparte merece Helen Mirren, estupendísima a sus 70 años, que parece la hermana de Julia Roberts. Si yo fuera estrellona de Hollywood ponía a todos mis asistentes a averiguar quién es el cirujano de esta señora. Se la ve más joven que Emma Thompson, y de Jacqueline Bisset ni hablamos, que parecía la madre de todas ellas.

Afortunadamente, también hubo premios para películas que sí se han estrenado. Aunque yo no las he visto. Porque qué queréis que os diga, una película cuyo título ya es una sinopsis; "12 años de esclavitud", me da terrible perezón. No así a los señores que votan los Globos de oro, que decidieron otorgarle el premio a mejor película dramática. Yo, personalmente, le daría el premio a futura it girl a una de las protagonistas de película, Lupita Nyong'o, y también le diría que se cambiara el nombre porque es muy duro ser it girl y llamarse Lupita:

El rojo siempre queda divino en los premios, lo malo es que se empasta con la alfombra...

La que sí he visto es "Breaking Bad" y me alegro de que le hayan concedido los premios a mejor serie dramática y a mejor actor para Bryan Cranston, ese hombre que debería dedicar el resto de su vida a dar seminarios de interpretación por el mundo entero, así de bueno es.

La guapérrima Robin Wright se llevó el premio a mejor actriz dramática en serie de televisión por "House of cards" y para la ocasión lució espaldas de nadadora y prometido joven:
El hombre bombilla que acompaña a Robin es Ben Foster, 33 años (ella 47). Muy bien Robin, que tu ex se dedica a enlazar jovencitas, pues tú también. A favor de Robin es que ella aparenta la misma edad que su futuro marido. Mientras que Sean Penn (su ex, ¿es que no lo sabíais?, ¿dónde vivís?, ¿en Marte?) se ha dedicado a ligarse mozas de buen ver menores de 30 desde que se divorció, ahora anda con Charlize Theron. Desde aquí te digo, Charlize, que Sean no me gusta para ti. Tú te mereces un Ewan MacGregor, un perfil de buen chico, Sean Penn te va a dar mala vida te lo digo yo, te lo dice Robin Wright, te lo dice Madonna (¿cómo?, ¿que no sabíais que Sean Penn estuvo casado con Madonna?, ¿dónde vivís?, ¿en Plutón?).

Robin Wright está que se sale en "House of cards", aunque a mí la serie me aburre soberanamente. Una serie sobre manejos políticos varios que te tocan un pie, ésa es la sinopsis de la serie. Wright y Kevin Spacey están tan bien que podrías verlos ahí, recitando las páginas amarillas, y parecería interesante. Pero no lo es. Es un muermo. Yo hubiese preferido el premio a otra de las nominadas, Taylor Schilling, la revelación de la temporada con "Orange is the new black":

Green is the new black

Además iba monísima. Es lo bueno de interpretar a una presa, sin maquillaje ni peluquería, que en cuanto te toca ir a un evento estás divina. Debería haberse llevado el premio a mejor actriz de comedia, lo que no me explico es porqué se considera a "Orange" una serie dramática y a "Girls" una comedia. Yo me río mucho más con la primera que con la segunda. También es cierto que "Girls" me da ganas de llorar cada vez que esta moza se empeña en enseñarnos sus atributos:

Lena Dunham de amarillo pollo.

"Girls" es una de las series más sobrevaloradas de los últimos tiempos. Es como "Sexo en Nueva York" pero más provocadora, básicamente porque la única que enseña cacho es la más fea. Es como "Gossip Girl", pero tomándose a sí misma muy en serio. Y lo peor de todo no es que sea pedante o poco graciosa para considerarse una comedia... lo peor es que todas sus actrices protagonistas caen como el culo.

Aún así, el premio a la peor vestida de la noche está reñido. El amarillo pollo de Lena Dunham hace daño a la vista, sí, pero ¿qué me decís de los volantes lolailo de Paula Patton?:

Edie Falco (Nurse Jackie, Los Soprano) con un vestido de raso del chino. Berenice Bejó, que solía ir siempre idealdela, esta vez se ha puesto unos apliques de papel pinocho en el vestido.

Drew Barrymore estaba que se salía, literalmente. Embarazadísima con su cara de pan más pan que nunca. Porque Drew Barrymore es una falsa guapa, tú te la encuentras pasado mañana en el Lidl, en la sección de cervezas, sin maquillar, y no la reconoces. Sally Hawkins (Blue Jasmine) sabía que no se iba a llevar el premio a actriz de reparto y por eso iba vestida con el mismo traje que llevó a la comunión de su sobrina Amber en su Southhampton natal. Sin embargo, Cate Blanchett sabía que se iba a casa con el globo de oro a mejor actriz y fue sobre seguro, de negro y de Armani.

Y acabo este repaso con algo de controversia. El vestido pantalón de Emma Watson y el de colores chillones de Sandra Bullock, ¿molan?, ¿no molan?


Y vosotros, ¿qué opináis?, ¿debería Jennifer Lawrence ir al casino, porque con su suerte se forra fijo?, ¿Es "12 años de esclavitud" tan aburrida como parece?, ¿quién fue la más elegante de la noche?, ¿y la más mamarracha?, ¿quién es el cirujano de Helen Mirren?, ¿alguien sabe por qué no invitaron a Heidi Klum?


Actualización: donde digo digo, digo Diego, ¡Heidi Klum sí que estaba! Pasó desapercibida porque su escote, esta vez, no iba de Los Ángeles a San Francisco, aunque su vestido parece un salto de cama de los años 90.

lunes, 14 de enero de 2013

El vestido negro, pero no soso

Dejémonos de los preámbulos de todos los años. En este post no vamos a hablar de los premiados, ni de las películas, ni de cuáles eran nuestros preferidos ¿Porque no he visto la mayoría de películas galardonadas? Sí, también, pero el motivo es que aquí hemos venido a hablar de modelacos. Modo Fotogramas off. Modo Cuore on:

Rachel Weisz acudió a la gala acompañada de un mafioso ruso. Ah no, que es Daniel Craig.

Pero antes de hablar de actrices nominadas, diseñadores de alta costura y glamour a cascopirro, ediquemos un párrafo a esas actrices que van a las alfombras rojas con la esperanza de que alguien importante la vea y diga anda, si sigue viva, no se ha vuelto a su pueblo en Omaha ni está en un centro de desintoxicación, la voy a llamar para darle un papelito. Es el caso de Alyssa Milano, niña prodigio en los 80, sex symbol en la época de “Embrujadas” y ahora bastante ha conseguido con que le pasen una invitación para la gala, pero no tiene contactos con grandes diseñadores y el vestido se lo ha comprado en el Wallmart de su barrio.
Con esta tela que brilla se hacen los disfraces de payaso que venden en "Fiestas Paco".

Y ahora sí, vayamos a por el glamour del bueno.
Guapérrimas estaban tanto Claire Danes como Naomi Watts. Una de rojo y ya está, la otra de rojo oscuro o burdeos o oxblood si dedicas tu vida a leer blogs de moda y vas notando como pierdes neuronas día tras día:

Jessica Alba iba muy mona, aunque no sé porqué se trajo el plumero mágico quitapelusas Duster de casa.

El negro suele ser el color que domina en las alfombras rojas: es elegante, adelgaza, sienta bien a cualquier edad y, cuando eres una actriz de renombre, no tienes porqué preocuparte porque tu gato blanco que pesa casi 6 kilos te llena la ropa negra de pelos. Para eso las actrices tienen a sus asistentes personales.

Julianne Moore aparecerá en todas las listas de las más elegantes con un winer en cuanto a alfombras rojas: el blanco y negro. También Nicole Kidman, de Macqueen, un vestido diferente que le sentaba divino, si no fuera porque ha vuelto a visitar a su doctor Troy particular y vuelve a tener esa piel lustrosa, tirante como de extraterrestre. Megan Fox, esa prestigiosa actriz cuyo papel más complejo ha sido en un videoclip de Eminem, va al mismo médico que Nicole Kidman.


También sexy y guapa, de negro, pero no sosa, iba Kate Hudson. De ella siempre se puede decir aquello de "qué mona va esta chica" como la pija de “Aquí no hay quien viva”. Kristen Wiig también de negro, con aberturas en sitios donde yo jamás sería capaz de llevar una abertura. Me refiero a la tripa, mal pensados.

Pero no todas las que optaron por im vestido negro, pero no soso, acertaron. Ahí tenemos a Sara Hyland (Modern Family), una criatura que debe rondar los 16 años, vestida de señorona. Al lado de Julianna Margulies  parece que les han cambiado las cuerpos como en “de tal astilla tal palo”, ese hit de los 80.

Un fiestorro de este calibre saca a la niña de 7 años que todas llevamos dentro. Tules, gasas y vestidos de princesita se repiten.  Amy Adams es una actriz impresionante pero hacedme caso, fiaos de mi palabra y no ocupéis 3 horas de vuestra vida en “The master”, ocupadlas en algo más útil: haced una limpieza a fondo de la cocina, ved un par de capítulos de “Accused” o id a las rebajas del Corte Inglés: 


Amanda Seyfried debería estar en mi lista de gente matable: además de tener pelo Pantene, ojos azules, piel de porcelana, va y sabe cantar y todo. 

En toda alfombra roja hay detalles que se repiten año tras año, sin faltar nunca, como Heidi Klum. Todas las ediciones alguna actriz aparece con un vestido estilo "que se me sale la teta". Esta vez han sido Jennifer Lawrence y su escote raruno y Jessica Chastain y ese andar recta como si fuera Cate Blanchett para que no se doble la tela del pechamen y se le vea tó, cuando ella es una actriz nominada y no va a enseñar las tetas como una actriz de segunda, de ésas que mueren al principio de películas como Viernes 13 octava parte.

Obsérvese el detalle de la señora detrás de Jessica Chastain, ella también piensa que ese vestido no es buena idea. Aunque la chaqueta de pelo de peluche de la señora tampoco lo es.
También es típico encontrarse con esas actrices que el “menos es más” se lo pasan por el forro. Es el caso de Eva Longoria y ese tupé con el que esperaba llegar al 1.70:


Pero Longoria y Halle Berry no fueron las únicas que han estado ensayando en el espejo hasta perfeccionar la técnica de "Muestra de pierna ante fotógrafo en photocall I". Ahí estaban Rosie Huntington y, cómo no, Heidi Klum.

En el grupo de las que piensan que menos es menos y más siempre es más, tenemos a Julianne Hough, que tiene apellido de estornudo y se puso todo lo que tenía a mano encima. En la foto la distiguiréis porque de su vestido salía más luz que de muchas ciudades africanas. El vestido de Lucy Liu contenía dentro todo el jardín botánico de cualquier capital del mundo.

Sienna Miller fue una pionera en su momento. Era una de esas actrices famosa por salir en las páginas de moda de las revistas, pero de la que nadie recordaba ninguna película. A día de hoy que ese puesto de actriz/it girl/imagen de todo tipo de marcas está más reñido que ser redactor en Cute Overload. Sienna quiere recuperar el trono de it girl y quiere ir de moderna y original (ese nicho de mercado de it girl bohemia ahora lo tiene Michelle Williams). Por querer ir de original ha acabado eligiendo un vestido que sabía nadie más iba a llevar. Se trata de uno inspirado en Marisol en la época de “Tómbola”.

Emily Blunt suele ser muy elegante y tiene esa clase natural de las estrellas de antes, pero aquí se pasó un poco. Eso sí, para la gala anual de premios de Bollywood iba ideal. Jennifer López en su estilo, embutida como un chorizo morcón, muy guapa y muy excesiva. Sustituid Jennifer López por Sofía Vergara y podéis leer exactamente la misma frase. Y todo el mundo dirá que Anne Hathaway iba muy elegante, pero qué queréis que os diga, yo la veo un poco pavisosa.

Hablemos ahora de los hombres de la gala.
Ah no, que es Kathryn Bigelow.

Anoche me vi la llegada de los famosos al evento, vía streaming gracias a E! online y al chivatazo previo de mi amiga A. Así que me vi esas entrevistas previas pensadas, básicamente, para que el actor diga de qué diseñador va vestido, y poco más. Dentro de ese poco más, Jon Hamm dijo que dirigía algunos capítulos de Mad Men pero que no escribía, que tenía problemas para escribir un mail, cómo iba a escribir un capítulo de Mad men. Entre eso y que su novia es una chica bastante normal, Hamm ya tiene toda mi simpatía. También Denzel Washington y Hugh Jackman tienen esposas normales, a las que ves que en las alfombras rojas harían lo que harías tú: luchar por no caerte de los tacones.


He dicho que no iba a hablar de los premios, pero sólo una cosita: ¿Es "Girls" una comedia?

Vosotros qué opináis, ¿Girls se merece el premio a mejor comedia, por encima de Big Bang Theory?, ¿quién os gustó más en la alfombra roja?, ¿quién menos?, ¿quién es el médico de Nicole Kidman?, ¿lo comparte con Megan Fox?