lunes, 15 de diciembre de 2014

Cuando la película es mejor que el libro

Que alguna vez pasa.

Lo típico es salir del cine con los brazos en jarras, mascullando que qué caro que está, que el libro te gustó más, que si llegas a saberlo te quedas en casa y te bajas el torrent y que las palomitas estaban gomosas. Pero hay excepciones. Como, por ejemplo, "Gomorra".

Basada en el libro del mismo título del periodista Roberto Saviano, Gomorra cuenta varias historias en paralelo que retratan la mafia napolitana en todos sus aspectos. Pensamos que la mafia se dedica a las drogas, la extorsión, el asesinato... cosas ilegales y chungas ajenas a nuestra vida diaria. En Gomorra se ve que la mafia se cuela en todas partes. En la ropa barata que se compra en los chinos y que imita a las marcas más prestigiosas, en las grandes empresas que necesitan un lugar donde enterrar sus vertidos tóxicos... Y los mafiosos no tienen el glamour de los Corleone, son o señores gordos con mucho gusto por ir en chándal o chavales de barrio feos como un dolor:


¿Y por qué es mejor Gomorra, la película, que Gomorra, el libro? Muy fácil. La película se entiende. El libro, no. Es una suma de datos, nombres, cifras, que supongo que te sonarán de algo si eres napolitano, pero si no lo eres sólo ves un montón de documentación ordenada de mala manera.

Quizá sea porque pertenezco a una generación que estuvo toda su infancia pensando que D'artagnan se llamaba Dartacan, pero a mí la novela de Dumas me pareció lo que viene siendo un ladrillo. No así su adaptación. ¿Qué adaptación?, preguntaréis. Desde luego, no ésa en la que Dartacan, D'artagnan era ese hombre con la expresividad de un trozo de chopped, Chris O'Donnell. Tampoco ésa en la que Milady era Milla Jovovich con bucles y repartiendo ostias como panes.

La buena es la antigua, con el mejor Dartacan, D'artagnan ever, Gene Kelly, y con una milady de Winter sencillísima:

Lana Turner, dispuesta a seducir a Dartacan D'artagnan, se ha puesto lo primero que ha pillado en el armario.

El director, George Sidney, era un habitual de los musicales y se nota en la coreografía de las luchas de espada. Además la película tiene una ironía que no aparecen en ninguna de las chorrocientas páginas de la novela. Por ejemplo, Constance (el interés amoroso de Dartacan D'artagnan y vecina suya) le conoce y le dice:

- Oh, monsieur, usted viene de los cielos.
- No, madamoiselle, sólo vengo del piso de arriba.

Pero cuando toca, la película también puede ser un auténtico dramón. Athos descubre que Milady de Winter es su ex esposa, la que le abandonó y le robó y ahora anda ejerciendo de espía doble y enrollándose con el duque de Birmingham o con Dartacan D'artagnan o con quien pase por ahí, y le dice: "Te amo como amo la guerra o la bebida, te amo como ama el hombre todo lo que es perjudicial para él".

Y ahora, lectores de mis entretelas, es cuando me apedreáis. Porque voy a decir que un clásico entre los clásicos, un incunable, uno de ésos que ha despertado vocaciones literarias... es un tostón mayúsculo. Y no hablo de uno de esos tostones que están en las bibliotecas para hacer bonito pero que nadie ha leído (tipo el "Ulises" de Joyce o los mamotretos de Proust). Hablo de "Moby Dick". Te lo lees pensando que es una novela de aventuras, con un poso filosófico y tal (que si la ballena que persiguen es Dios o el destino o similar) y resulta que aquello parece una enciclopedia sobre la vida marina, venga a hablar de especies de ballenas. Pero la película de John Huston es otra cosa.

El bellísimo Gregory Peck se transforma, gracias a una pata de palo y una cicatriz que le surca toda la cara, en el capitán Ahab. Un tipo obsesionado con cazar a la ballena blanca que le dejó hecho una piltrafa. Poco a poco contagia su empeño a toda la tripulación, excepto al segundo de a bordo, el único sensato, que no entiende porqué es mejor perseguir a una sola ballena que quedarse donde están, muy cerca de una manada que podrían capturar. Y entonces la encuentran y pasa esto:


Lo que dice Ahab mientras apuñala a la ballena es: "Desde el corazón del averno, yo te apuñalo. Con todo el odio, te escupo mi último aliento".

El cadáver de Ahab, enredado en las cuerdas de los arpones, hace una señal a sus hombres para que le sigan. Y el primero en querer seguirle es precisamente el que se mostraba más reacio. ¿Y el público?, ¿ve la película asustado, sabiendo perfectamente que la palman todos y diciéndose "no vayáis, no vayáis..."? Pues no, el público también quiere seguir a Ahab y cargarse a la dichosa ballena. Toda una catarsis es lo que es esta película. Y eso que siempre la he visto en la televisión e interrumpida por los anuncios...

Por supuesto, también hay empates técnicos. Adaptaciones a la altura del libro: Las amistades peligrosas, Arrugas, L.A. Confidential, Misery, Déjame entrar...

Y vosotros, ¿qué películas basadas en libros recordáis que superaran al original?

12 comentarios:

Juli Gan dijo...

Haylas. Mi peli favorita al libro es "testigo de cargo", el relato de Agatha Christie es muy escueto y Billy Wilder saca petróleo gracias a Charles Laughton abogado pachucho, Elsa Lanchester, enfermera pesada y sobre todo Marlene Dietrich, la pérfida alemana maligna. Hasta el ex-suegro de Al bano está bien.

No he visto Gomorra (me da yuyu), pero de los tres mosqueteros de George Sydney es bien divertida, y saca, igual que en la novela, un fiel retrato de lo pendencieros, fantasmones y sableadores, en todos los sentidos, que eran estos personajes de la corte capeta.

loquemeahorro dijo...

Pues yo no fui capaz de terminarme ni un capítulo de L.A. Confidential, ese estilo literario me pone de los nervios. La película me encantó.

Hitchcock era especialista en adaptar relatos reguleros para hacerlos mucho mejor, como Rebeca. Sin embargo, casi no le perdono lo que hizo a Extraños en un tren, sobre todo porque no se parece en nada.

La de Dartacán meets Lana Turner siempre he pensadsado o que era la película que estaban rodando en Cantando bajo la lluvia.

el convincente gon dijo...

'Los puentes de Madison'. No me gusta ni la película ni el libro, pero reconozco que el libro es muchísimo peor que la película.

Uno dijo...

Por esas cosas de la vida cayó en mis manos el guión de "La camarera del Titanic" mucho antes de que se rodara y me pareció una auténtica joya que leí de un tirón absolutamente arrobado.
La peli, a pesar de estar protagonizada por dos actores muy admirados por mi por distintas y complejas razones, no me emocionó en absoluto.

También recuerdo la versión para la tele de "Fortunata y Jacinta" muy bien hecha pero con una Ana Belén en mi opinión muy poco adecuada para el personaje.

Santy Trombone dijo...

"El diablo viste de Prada", me regalaron el libro y me fue imposible pasar de la mitad, es tan absurdo, tan ridículo y tan malo, que casi lo quemo con un mechero... Sin embargo la pelí me resulto muy entretenida y esa monstrua llamada Meryl Streep está tan soberbia, que tiemblan las piernas cada vez que me acuerdo de sus miradas de soslayo...

Esti dijo...

Juli, totalmente de acuerdo, "testigo de cargo" es un peliculón, aunque no he leído la novela.

Loque, dale una oportunidad al género negro. ¡Ellroy es lo más!

Gon, ¿te puedes creer que apenas recuerdo "Los puentes de Madison"? La vi en el cine en su momento y la he olvidado totalmente.

Uno, habría que ver si hubo muchos cambios entre la película y el guión, si fue cosa de miscasting...

Calamarín, "el diablo..." es de estas pelis que te la ponen una tarde en la tele y te la acabas tragando enterita. Un guilty pleasure como una catedral.

loquemeahorro dijo...

No, si yo con el género negro no tengo ningún problema, de hecho soy usuaria de nivel avanzado, lo que me ponía nerviosa era esa forma de escribir de Ellroy, en verdad en verdad os digo.

combatientes70 dijo...

sin duda El Nombre de la Rosa, el libro es un absoluto coñazo y le película te entretiene y encima sale mi admirado Christian Slater enseñando un culto delicioso... Una maravilla

Sorokin dijo...

Pues por alusiones, diré que "el nombre de la rosa" es un libro magnífico y que la película es un coñazo- ¿Vale?

Esti dijo...

Loque, como diría Camilo Sesto: ¡Ellroy mola mazo!

Combatientes, Sorokin, y yo que pienso que "el nombre de la rosa" es empate técnico...

Madreconcarné dijo...

Pues aunque parezca una de esas señoras-señoras en permanente modo madre (se me da un pimiento, mismamente, de la parecencia) he de decir que en general los cuentos tradicionales en versión original son infumables de verdad, y las películas sacan lo mejor de ellos mismos.
Lo dice una que leyó Peter Pan en versión original como una veintena de veces. Si nos vamos a caperucitas, cenicientas, o bellas en todas sus versiones (bestias o durmientes), ya ni te digo.

Madreconcarné dijo...

mestoyacordandahoramismo de los viajes de Gulliver. Más de lo mismo. Casi cualquier versión que me digas es mejor que el pestiño original.