lunes, 24 de noviembre de 2014

Hamburguesas y chocolate (primera colaboración, chispas, en Glupglup)





¿Por qué las top models aseguran no hacer nada para mantener ese cuerpo que Dios les ha dado?, ¿por qué la comida preferida de todas las ángeles de Victoria’s Secret son las hamburguesas y el chocolate y no la quinoa y el tofu? Os contamos, en exclusiva mundial, su auténtico secreto de belleza.

Hay cosas que despiertan nuestro Hulk interior. ¿El hambre en el mundo?, ¿la corrupción en España?, ¿la guerra en Siria? Eso también, pero menos. Me refiero a esas entrevistas, generalmente tipo test, que se realizan a la top model/actriz/it girl de moda. En todas ellas, invariablemente, a la pregunta: ¿cuál es tu comida favorita?, ellas responden que las hamburguesas y el chocolate.

Y entonces nosotras, mujeres de la talla 40, que ya probamos la Dukan (y por eso sabemos que se llama Dukan, y no Dunkan) y que pagamos religiosamente el gimnasio (lo de ir ya es otro cantar), nos sentimos defraudadas. Es más, estafadas. Es más, cabreadas hasta tornarnos de un color verde-Blandi Blub...

...si queréis saber el auténtico secreto de belleza de las tías rematadamente buenas tendréis que leer el resto aquí, en el magazine GlupGlup, un sitio tope divertido y con montones de artículos (como el de la menda) sobre cultura, gastronomía, estilo de vida y cosas que no son nada de eso pero y qué.

Habituales del blog, no creáis que abandono (más quisiérais)  ni mucho menos. La semana que viene volveré a actualizar (es una amenaza). Es más, si queréis comentar aquí o en Glupglup, yo estaré al quite.

lunes, 17 de noviembre de 2014

Apionabo y alginato

Hay gente adicta al chocolate. Gente adicta al juego. Gente adicta a "sustancias". Y luego estamos los enganchados a los programas de cocina.

El Pesadilla en la cocina de Gordon Ramsay y el de Alberto Chicote, Master Chef, Sabotaje en la cocina, Crónicas carnívoras y ahora Top Chef. No hay programa de cocina que no haya visto alguna vez. Y con tanto programa de cocina ya nos creemos expertos y vamos a un sitio de menú del día y decimos cosas como que el filete a la plancha nos resulta "plano en boca" y que al flan con nata "le falta rock and roll".

Pero con los programas de cocina no sólo aprendes formas molonas de ser el típico cliente tocapelotas. También aprendes vocabulario, como que el apionabo no es un personaje de los Fruittis, sino una verdura (mitad apio y mitad nabo, quién lo iba a decir). Que el alginato es un derivado de las algas usado para hacer esferificaciones y la xantana un polisacárido espesante. Y que en cocina también existen los trampantojos:

Ni es chocolate, ni churros con azúcar.

El mejor trampantojo que una servidora ha probado, ever, son estos falsos churros con chocolate. Churros salados rellenos de queso que se untan en una crema de frijoles. Gentileza de la Panamericana. Cuando tengo un mal día cierro los ojos y pienso en el cóctel de gambas y bloody mary del Panamericana y me transporto al paraíso de las cosas ricas.

Pero si Top Chef fuera simplemente un programa educativo sobre cocina no sería tan divertido. Para que algo enganche tiene que tener conflicto. Y este año el conflicto viene dado, sobre todo, por un personaje bigger than life: Carlos. El resto de concursantes, excepto honrosas excepciones (David, relamido y redicho y con infancia de niño gordo en un pueblo donde los otros niños le pegaban; Honorato, el cocinero veterano y experto en comida viejuna; Rebeca, la cocinera hecha a sí misma y machirula; Marc, el único que critica a los demás con tanta saña como el propio Carlos), son un rollo.

Carlos no solamente es el típico cocinero moderno empeñado en innovar haciendo cosas como fuego comestible o aceite de tierra. Carlos es un iluminado. Cuando cocina se pone histérico, corre, insulta, reclama a gritos el alginato o congela la vitrocerámica al tirar hidrógeno líquido encima. Cualquiera que haya visto el programa más de una vez ha pensado que esto acababa como Puerto Hurraco, pero con Carlos usando su juego de cuchillos para eliminar a algún otro concursante. Y si uno ha corrido peligro, ése es Marc. 

Carlos y Marc. Marc y Carlos. Tanto monta, monta tanto.

Este par de dos demuestra que todo reality necesita conflicto y un buen villano. La pregunta es: ¿el villano es Carlos o Marc? ¿o es una guerra entre dos Ángelas Channing de la vida?

Y es que la cocina no es un lugar agradable donde preparar con amor bizcochos caseros y deliciosos. Qué va. Es un campo de batalla. Parecido al de este episodio de Que Viva Italia: "hostaria". La competitividad  y el afán por innovar es tal que la cocina está perdiendo el norte.


Como decía David Sedaris en uno de los relatos de Mi vida en rose, "si la cocina es un arte, estamos en plena fase Dadá".

Ah, cómo me gustaría una final de Top Chef en la que Chicote y esos dos figurantes con frase que le acompañan dieran sólo 50 minutos a los concursantes para hacer el mejor plato posible. Podéis usar todos los productos que nos ha donado Makro y el excedente se dará a Banco de alimentos. El tiempo empieza ya...

Un concursante presenta un jardín zen de queso camembert, especias y fruta congelada. Otro, aire de zanahoria con leche amarga de coco. Y el tercero... un sandwich mixto. Que ha preparado con pan de molde, queso, jamón york y una sandwichera. Ha tardado 5 minutos y el resto del tiempo lo ha pasado chateando en el whatsapp. Los jueces prueban los tres platos. Consideran que el aire de zanahoria es un plato sabroso, pero al que le falta un concepto potente detrás. Les gusta el juego de texturas y la presentación del jardín zen, pero les disgusta ese pelo negro que se han encontrado en medio de la arenilla de queso camembert. El sandwich mixto, sin embargo, les parece clásico, tradicional y exquisito. Si algo es perfecto, ¿por qué cambiarlo?, ¿si un tomate está rico con sal y aceite, para qué puñetas liarse a esferificarlo?

Y vosotros, ¿también estáis enganchados a los programas de cocina?, ¿vuestras vidas están vacías sin alginato?, ¿sabéis distinguir el hinojo de la albahaca o el eneldo?, ¿sois pro Carlos o pro Marc?


lunes, 10 de noviembre de 2014

Acción de Gracias en casa de los Nolan

Mira que hemos adoptado un porrón de cosas de los Estates: disfrazarnos de mamarrachos en Halloween, el ketchup, las cadenas de hamburgueserías con camareras que van en patines, el black friday... Pero tres cosas se nos resisten: el béisbol, la coca cola sabor cereza y Acción de Gracias.

Acción de Gracias celebra la llegada de un grupo de colonos a Estados Unidos y cómo unos indios, viéndoles sin comida y mareados del viaje, salieron a su encuentro para ofrecerles comida, en concreto, un pavo. El resto de la historia ya sabéis cómo es, los colonos se lo pagaron extinguiendo al pueblo indio, como bien se explica en "La familia Addams".

A día de hoy Acción de Gracias es una excusa tan buena como cualquier otra para hincharse a comer cosas de ésas que salen en los anuncios de coca cola y que han hecho de los Estados Unidos de América el país con más gordos por metro cuadrado:


Todas las familias americanas se reúnen en torno a la mesa, se ponen al día e intentan que la velada transcurra tranquila. La mayoría evitan temas espinosos como la política. En casa de los Nolan el tema a evitar es el cine. Pero no hay manera cuando Chris y Johnny llegan a casa, se sientan en la mesa con pavo, mazorcas de maíz y salsa de arándanos y sueltan:

- ¿Habéis visto ya nuestra peli?

El resto de la familia se miran los unos a los otros con espanto.

- No... no he tenido tiempo- dice Matt, el hermano mayor, aunque en realidad sólo vio "Memento" en su día, y no entendió un pijo. Porque a él lo que le gustan son esas películas que se llaman lo que sea más "de pelotas".

- Pero si te envié el enlace de Pirate Bay y todo...- dice Chris.

- ¿Vosotros tampoco la visteis? - pregunta Johnny, el hermano pequeño y coguionista de casi todas las películas de su hermano, a sus padres.

Ellos se miran con pánico. Porque como buenos padres ellos ven todo lo que hacen sus hijos, desde aquel aciago día en que el padre compró a Johnny una súper 8 en vez de un bate de béisbol. Ay, qué felices hubieran sido los Nolan si no hubiera regalado la súper 8 a los niños...

- Sí que la hemos visto- confiesa la madre- ¿un poco de pavo relleno? lleva dentro ciruelas, pavo, jamón, pimiento, guisantes...

- ¿Y os ha gustado?- pregunta Chris.

Christopher Nolan no es hombre de chándal.

Los padres se miran, otra vez, con pánico.

- No les ha gustado, Chris. Si es que no les gusta nada de lo que hacemos. Ni siquiera cuando grabamos la fiesta fin de curso de Matt en el 85...- dice Johnny.

Jonathan es como Chris, pero en plan chico sanote del Medio Oeste. Que sus padres siempre confiaron en que se le quitaría la manía ésta de hacer pelis largas y complicadas y se haría jugador de rugby. Pero no.

Ewan McGregor + Noah Emmerich = Jonathan Nolan

- ¿Pero qué es lo que no os gustó? Si a ti mamá te encanta Matthew McConaghey...- insiste Chris.

- Sí, me parece muy guapo. Pero es que en vuestra película ni siquiera enseña el torso.

- Ésa no es una crítica constructiva, madre.

- Ya, bueno.

- Qué es lo que no te gustó de "Interstellar"", venga, va.

- Es muy larga, Chris. Te lo tengo dicho, dos horas como mucho.

- 90 minutos es lo ideal- añade el padre.

- Pero en 90 minutos no puedo hacer una epopeya sobre viajes al espacio que incluye una reflexión sobre las relaciones padres-hijos, una crítica sobre cómo estamos tratando a nuestro planeta y una explicación de conceptos científicos tan complejos como la quinta dimensión y los agujeros de gusano.

- Pues haz dos películas, Chris.- sentencia el padre.

- De todos modos, eso de los agujeros de gusano y tal... me parece que ahí os habéis colado.- añade la madre.

- ¡Pero si estuvimos hablando con un científico mazo de rato!- se defiende Johnny.

- A ver. Primero, que los agujeros de gusano son una hipótesis teórica, pero no se han visto nunca. Y además, de existir, eso de viajar en el espacio y en el tiempo a través de ellos es imposible, porque las dimensiones extra sólo existen a escala subatómica.

- Jope, mamá, ¿desde cuándo eres tú una experta en física?, ¿ha hablado Oprah del tema en su programa o qué? - dice Chris.

- Vuestro padre me regaló "Una breve historia de casi todo", y ahí viene explicado. Pero vamos, que también sale en la wikipedia.

No sin mi americana.

- A ver, que eso son licencias dramáticas. Como Luc Besson con la peli ésa de en la que Scarlett Johansson usa el 100% de su cerebro y tiene súper poderes.

- Yo cuando pienso mucho rato me duele la cabeza- dice Matt, el hermano mayor y el normal, que trabaja conduciendo un autobús Greyhound.

- Y eso es lo que pasaría si usáramos el 100% de nuestra capacidad cerebral, que petaríamos - resume la madre.

- Yo sólo quiero hacer una película que os guste. Copón.- dice Johnny, que es el más sentimental.

- Deja el ponche un poco, Johnny, que te pones muy tonto- dice el padre.

- Johnny, vamos a hacer una película que guste a nuestra familia. Una película sencilla, de 90 minutos.

- Y que se entienda - pide Matt.

- Y que Matt y cualquier americano medio que  nunca ha leído a Proust entienda.

- ¿Quién es Proust? - pregunta Matt.

- ¡Haced una peli del oeste! O mejor, una de la Segunda Guerra Mundial- pide el padre que, como todo padre, es fan de los westerns y de las películas bélicas.

- Esos géneros están sobrexplotados. Pero me gusta la idea de revitalizar un género que el Hollywood actual tenga de lado. Yo lo cogeré y le insuflaré vida. Como he hecho con Batman. - dice Chris.

Los hermanos se miran. Los dos han tenido una idea.

- ¿Estás pensando lo mismo que yo? Que hay un género con el que Hollywood no se ha atrevido nunca...

- Y sólo nosotros podemos hacer una película profunda y compleja sobre él.

Y entonces dicen los dos a la vez:

- ¡El porno!

A la señora Nolan el pavo relleno se le va por el otro lado y empieza a toser. Pero los hermanos Nolan no se dan cuenta, están en pleno proceso creativo.

El mismo abrigo de paño desde "El truco final", debe oler a cuadra.

- Lo veo. Será una reflexión sobre el amor, el sexo y el pudor. Y la protagonista será Jennifer Lawrence, que lo está petando y no hemos trabajado con ella.

- ¿Y ya querrá salir en bolas?

- Nosotros la convenceremos. Y tenemos que buscar un papel para Michael Caine. 

Mientras los hermanos están con su brainstorming, el resto de la familia se acaba el pavo.

- Otra Acción de Gracias que ni van a probar mi pavo relleno de todo lo que había en el súper- se lamenta la madre.

- Y la peli ésta última no estaba mal. La parte del planeta de agua está muy chula - dice el padre.

- Y Mc Conaghey no enseña cacho pero está convincente en su papel.

- Si le quitaran el final ése de la quinta dimensión y las ñoñerías de Anne Hathaway sería muy buena película.

- Y así duraría dos horas.

- Pues sí, anda pásame el ponche.

Y vosotros, lectores de mis entretelas, ¿habéis visto "Interstellar"?, ¿celebráis Acción de Gracias? y, sobre todo, ¿habéis votado ya a "La leonera" en el festival Sonorama?, ¡que sólo queda un día!

lunes, 3 de noviembre de 2014

¿Qué mascota deberías adoptar?

Un día que estabas en el metro encontraste un ejemplar del 20 minutos y te leíste este artículo sobre lo buenísimo que es tener una mascota. Y desde entonces estás ahí, dándole vueltas al asunto. Porque tú eres así de voluble, y también tomas leche de soja desde que leíste en el Huffington Post que la leche de vaca es malísima, horrorosa, peor que el cianuro, que el talio o las grasas saturadas.

Para ti, amigo indeciso que no sabes qué mascota adoptar, tengo este práctico y súper riguroso test con el que encontrarás cuál es el animal que deberías elegir como compañero de piso, qué digo de piso, de vida.


Estás en el metro (sí en el mismo vagón donde has encontrado el 20 minutos) y entra un músico a perpetrar con su acordeón una versión de "my heart will go on" de Celine Dion. Tú....:
A. No le das nada. Faltaría más. Seguro que quiere el dinero para drogarse.
B. Te enfrascas en la lectura del 20 minutos y te haces el loco.
C. Le das dinero. Es más, le das una moneda de 2 euros, y eso que en la cartera también tenías monedas de 10 y de 20 céntimos.
D. No le das nada, pero no por falta de solidaridad, sino porque te parece un atropello a la música y a tus oídos el sonido del acordeón, el peor instrumento que existe, con permiso de la gaita.
E. Le das todas las monedas de dos y de un céntimo que tienes en la cartera.

Para conquistarte, hay que...:
A. Tratarte como una reina (o rey).
B. Ignorarte. Te enganchan los que pasan de ti.
C. Ser buena persona.
D. Tener inquietudes, intereses, gusto por las películas coreanas...
E. Esperar a las 4 de la mañana, a esa hora, y con cinco copas encima, te conquista cualquiera.

Tu trabajo ideal es...
A. Ama de casa que se dedica en exclusiva a tomar café, ir al gym y supervisar al servicio.
B. Autónomo, trabajando en casa, todo el día en pijama.
C. Trabajo social, enfermería, enseñanza infantil...
D. Diseñador de apps para Apple.
E. Que me toque la lotería y no tener que trabajar nunca más.

Tu peor defecto:
A. Vanidad
B. Egoísmo
C. Ingenuidad
D. Pedantería
E. Holgazanería

¿Dónde te compras la ropa?
A. En tiendas de grandes marcas.
B. En tiendas bohemias de Conde Duque o el Borne.
C. En el Alcampo
D. En tiendas de segunda mano de Malasaña o de la Riera Alta.
E. Online, que es más cómodo y te lo traen a casa.

Es domingo, ¿cómo lo pasas?
A. Aprovechas para hacerte un completo: pedicura, manicura y baño de espuma con pétalos de rosa.
B. Te quedas en casa leyendo a tu aire.
C. Te vas con tu cuadrilla a la sierra a rodearte de aire puro.
D. Vas a una exposición de un artista conceptual en el Matadero.
E. Duermes y ves películas malas de ésas protagonizadas por actores en horas bajas.

¿Ya habéis rellenado el test? Pues aquí tenéis las respuestas.

Mayoría de A: un perro patada

Dentro de ti no hay una estrella (como cantaba Bertín Osborne en la inolvidable "Lluvia de estrellas"). No. Dentro de ti hay una señora del barrio de Salamanca que pugna por salir a la luz. Las horas pasan como minutos cuando estás en el Corte Inglés de Serrano. Tú, más que una mascota, quieres una figurita de Lladró. Por eso un Yorkshire, un maltés o un caniche pequeñito son tus mejores opciones. Y más ahora que Louis Vuitton saca bolsos para que te los lleves por ahí cuando bajes a Marbella o salgas a hacerte la manicura.

Mayoría de B: un elegante y desidioso gato

Esta maravilla está sacada del libro "cómo saber si tu gato planea matarte".

Cuando una fiesta está en su apogeo, tú eres de los que les entra un ataque de sueño y coge y se marcha sin siquiera avisar con un "me voy a ir yendo". Independiente y a tu rollo, pensaste que tu mascota ideal era un pez. Pero los peces se dedican a nadar y morirse (esto último con mucha facilidad), por eso tu mascota perfecta es un gato, capaz de ser peluche y tigre. De sentarse en tu regazo y ronronear para, acto seguido, pegarte un arañazo porque "le ha dado por ahí". Independientes e imprevisibles, como el chico ése de la uni que pasaba de ti todo y te tenía loquita perdida, el gato conseguirá que le idolatres, y eso que te va a dejar el sofá destrozado.

Mayoría de C: un chucho de mierda.

Esta maravilla está sacada del libro "Mi perro: la paradoja"

Tú eres una excelente persona. Más de una vez (y de dos) te han dicho: "de bueno que eres, a veces pareces tonto". Ofreces a tu amigo del pueblo que se quede en tu casa unas semanas mientras busca trabajo y piso en Madrid, sabiendo que eso significa que no serán semanas, sino meses, y que jamás te pagará un duro. Por no hacer, ni limpiará el baño cuando deje la ducha llena de pelos. Eres un pedazo de pan y por eso tú irás a una protectora de animales a por una mascota y elegirás al perro más feo que, eso sí, te lo va a pagar con creces. En concreto haciéndose pis encima cada vez que vuelvas a casa. Ya sea cuando vuelvas del trabajo, de pasar el día fuera, o después de dos minutos porque te has dejado las llaves. 

Mayoría de D: un mini cerdo


Hipster, innovador, adelantado a tu tiempo. De los que hace cola para comprar el Iphone 6 y reniega de Woodkid, que es un vendido porque sus canciones salen en los anuncios. A ti no te vale cualquier cosa. Y por eso vas a tener la mascota más novedosa del lugar. Pequeña, adorable, limpia (aunque no lo parezca) y, sobre todo, original: un mini cerdo. Además, sacarlo a pasear por Malasaña te garantiza ser el más fotografiado. Dentro de nada Leonard (que se llamará así tu micro cerdo, en honor a Leonard Cohen) y tú seréis una celebridades en Instagram.

Mayoría de E: una planta, preferiblemente un cactus


Por favor te lo pido, no adoptes a ningún ser vivo. Morirá. Es más, no entiendo cómo tú sigues vivo. A tus años sigues alimentándote como un Erasmus, a base de pasta, patatas y arroz y sigues dándolo todo todos los fines de semana, que para ti empiezan los jueves, a los que tú llamas, en un alarde de originalidad, "juernes". La ley del mínimo esfuerzo rige tu vida y hasta un pez correría peligro de muerte a tu lado. La mejor opción para ti es o un cactus o una de esas flores de plástico tan monas que venden en Hábitat. 

¿Qué os ha salido en el test?, ¿estáis de acuerdo con el resultado? y, sobre todo, ¿alguno de vosotros está dispuesto a comprarse un micro cerdo?

Y vuelvo a pediros el voto, con la insistencia de un candidato a la presidencia. Pero esta vez es para otro concurso online, el de Sonorama (sí, el festival de música también tiene un festival de cortos). Voten, oigan, que no hace falta ni salir de casa, ni buscar cuál es tu colegio electoral, ni empadronarse.